Esto ocurrió hace alguno días: Las televisoras Televen y Venevisión decidieron sacar de su parrilla las novelas "El Capo" y "Rosario Tijeras" por ser consideradas "narco novelas" y que atentan contra el buen desarrollo de niños, niñas, adolescentes, perros, suegras, blah, blah, blah...
Sinceramente me perece una medida poco madura y ridícula, si, esa es la palabra RIDÍCULA. Esto da a entender que algunos entes que propiciaron esta medida de autocensura, pues, no le exigieron que las quitaran sino que por miedo a que se tomaran medidas contra ellas (las plantas televisivas) decidieron sacarlas del aire. Bueno como iba diciendo, ellos creen que el poebloh venezolano es tan mente blanda o mente de pollo, pendejo, pánfilo, como usted le quiera decir, pues, que si seguían viendo esas "narco novelas"se iban a meter a Capos o que se yo a prostitutas sedientas de venganza que andan matando a diestra y siniestra con tijeras al que se le atraviese. Señores, si no aceptan que todo esto que está ocurriendo es parte de la satanizada globalización, es mejor que apaguen la TV, cierren todas sus cuentas en las redes sociales y se vayan a dormir a un monasterio boca abajo y arropados de pies a cabeza para que no sigan ladillando y así dejar vivir a los demás que sabemos afrontar la realidad que se ve reflejada en una "narco novela". Les diré, la verdad yo no veía esas novelas, pero cuando me enteré de lo ocurrido se me volteó el hígado y se me arrugaron los lunares.
¿Qué pretenden ellos? ¿Que vuelvan las novelas de antaño? yo creo que eso es lo que quieren, que nos encasquillemos viendo novelas rosas donde abundaban la laca, las hombreras y las uñas largas y rojas. Ellos lo que quieren es que vuelva Lupita Ferrer y José Bardina que para aquel entonces tenían el monopolio de las novelas, si tú querías hacer una novela los ejecutivos lo único que te pedían era que en el elenco metieras a Lupita o a José Bardina, de no ser así tú novela no iba pal` baile. Así de sencillo. ¿Eso es lo que quieren? Ellos quieren que nos cortemos las venas viendo a Gledys Ibarra con sus pelos malditos llorando más que una magdalena, o que nos quedemos dormidos escuchando los interminables parlamentos de Amanda Gutiérrez en La Dueña. O que nos vacilemos a Tania Sarabia haciendo de loca. Esto no puede volver, esos son clásicos del pasado que sólo sirven para ser recordados.
Hoy la realidad es otra, las temáticas de "El Capo" y "Rosario Tijeras" es algo que azota a nuestra sociedad día a día. No son inventos, hay que saber asimilar las cosas. Esas novelas se hacen para entretener y recordarle a la gente el cáncer que nos come poco a poco y tu al saber el mal que tienes, sabrás como erradicarlo.
En cuanto a la autocensura que se impusieron esos canales de verdad que pena me da, ni siquiera lucharon por sus intereses, porque por ejemplo Televen pone esas novelas al aire no porque les gusta, sino porque dan dinero, dan ingresos a la planta. Que vergüenza con lo que ha ocurrido. Quedamos ante el mundo como unos pacatos que son incapaces de afrontar a un "enemigo" que duerme con nosotros en nuestros cuartos y salas: la televisión.
Sólo doy dos opciones para que este país salga adelante: que Mafalda sea electa presidenta o que tengamos una conciencia madura y crítica ante las realidades que se manifiestan por diversos medios, como es en este caso, la TV.
Sólo un dato, la última novela que me vacilé fue "La Mujer de Judas" eso fue como por el 2003 más o menos, esa sí era una novela.
Chaito pues, vayan con fundamento y por la sombrita. Yo me voy, se me queman las tajadas.
¡VIVA LA PEPA!
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